10 de octubre de 2005

Y no me deja ir...

Estoy latigueado por un espíritu maligno que todas las noches me acosa y no me deja ir, no me deja partir.
Habrá que masajearlo como a las ballenas y habrá que sumergirlo como a los silencios.
Y así como uno busca la imperfección como modelo estético el maligno me busca a mi como sujeto de diversión.
No me resigno a ver lo que me depara el futuro, todo lo que ella dijo, lo que podría ser cierto ó solo una broma cruel.
Niña ¿Qué va a ser de ti?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu personalidad es muy introspectiva, según datos de la CIA, hay una imitación al Ché Guevara, y eso te hace sospechoso ante los ojos de la derecha internacional.